Uber quería apoderarse del sector de los taxis en Bruselas por cualquier medio
El ex cabildero de Uber, Mark MacGann, convertido en informante acusó a la compañía de transportes de hacer todo lo posible para imponer un monopolio en la capital belga, incluida la violación de la ley.
“Uber nunca tuvo la intención de modernizar el sector de los taxis en Bruselas”, dijo Mark MacGann al comité del parlamento de Bruselas que investiga a Uber esta semana. “La multinacional quería apoderarse del mercado por todos los medios, incluidos los ilegales, para ejercer un monopolio”.
El ex lobista jugó un papel clave en la investigación “Uber Files” llevada a cabo por un consorcio internacional de periodistas con acceso a más de 124.000 documentos confidenciales de la empresa estadounidense que detallan el alcance de las operaciones de influencia de la multinacional con diferentes gobiernos.
La investigación mostró que los cabilderos de Uber habían mantenido estrechos vínculos con el gobierno de Bruselas para obtener una legislación más ventajosa y prepararse para la entrada de la corporación en la capital, incluso entre el propio MacGann y el exministro de Movilidad Pascal Smet.
El comité especial del parlamento de Bruselas se creó para investigar la estrategia de influencia de la empresa de viajes compartidos en la capital belga, particularmente en el contexto de las reformas en el sector del taxi adoptadas unos meses antes.
MacGann dijo que se había encontrado con Smet dos veces en su oficina mientras el ministro trabajaba en la reforma de los taxis, así como en otra ocasión en el Hotel Amigo.
El denunciante dijo que su relación, que data de antes de que las discusiones se centraran en las reformas, no siempre había sido positiva y que Smet había estado «furioso» por un acuerdo de asociación celebrado entre Uber y Brussels Airlines.
MacGann pidió una regulación más estricta en torno al cabildeo corporativo, así como una mejor protección para los denunciantes en Bélgica.
