València sufre desde hace años la intrusión de los taxis piratas sin solución

Los taxistas llevan años denunciando el transporte ilegal sin que se haya resuelto

Denuncian que una taxista de Sabadell realiza servicios en Barcelona

La noche en València, Manises y el aeropuerto de Alicante, llenos de taxis piratas desde hace años

Los taxis piratas llevan años en la ciudad de València campando a sus anchas. Sobre todo en las puertas de las discotecas y locales de ocio, es algo que se ha vuelto habitual. «La policía no está haciendo nada porque dice que pueden hacerse pasar como amigos y no hay forma de demostrarlo», asegura uno delos taxistas que llevan seis años denunciando esta situación sin que haya una intervención directa de las autoridades.

Los taxis piratas se colocan en las inmediaciones de estos locales y van haciendo traslados toda la noche. En unos casos quedan directamente con los posibles clientes y en otros prestan servicio a quienes se lo pidan en el momento. La mayoría son conocidos. «El boca a boca hace mucho y todo el mundo sabe a quién puede recurrir», asegura. El caso es que a día de hoy se trata de una práctica muy extendida.

Lo dicen los taxistas, que están hartos de esta situación y de que no se les haga caso. «Llevamos cinco o seis años denunciándolo en la Mesa del Taxi y nada», dice Fernando del Molino, presidente de la Federación Sindical del Taxi de València, que asegura que el problema «va a más» y que «tiene mala solución».

«Es muy difícil pillarlos porque dicen que son amigos y los tienes que creer. La única forma sería que un policía se hiciera pasar por cliente y los pillara, pero la policía no quiere porque dicen que eso es incitación al delito. No tenemos colaboración».


Paradas de taxi en València

 

Paradas de taxi en València


Tampoco por la vía de las inspecciones al transporte han encontrado una solución. «Nos dicen que no tienen medios para esto y nos remiten a la Policía Local».

Y cuando se comenta cada año en la Mesa contra el Intrusismo, un espacio en el que salen todos los problemas del taxi, «la atención y los medios se la llevan los VTC, que es un problema muy grave también».

En el caso de los ciudadanos chinos, este representante del taxi asegura que tienen una aplicación por la que hacen los contactos, pero «es muy difícil pillarlos porque está en su idioma».

Fernando del Molino asegura, de todas formas, que el problema del intrusismo en el taxi no se limita solo a las discotecas de València. Ocurre en el aeropuerto de Manises, aunque «no proliferan», y ocurre sobre todo en el aeropuerto de Alicante. «Allí hay verdaderas flotas para alemanes, ingleses, rusos…. Tienen hasta locales con furgonetas», asegura.