Aparece el cuerpo de un taxista en un piso de Arteixo que llevaba 18 meses muerto
Los vecinos de Muabia H. Bouza pensaban que se había que tenido que ir de urgencia a Siria, su país de origen.
Aunque a todos extrañó que un hombre «tan educado, recto y hablador con todo el mundo», relatan, se fuera sin despedirse ni dar una explicación.
Taxista en A Coruña, imaginaban que había tenido que viajar por la enfermedad de algún familiar y luego allí, por la situación que atraviesa aquel lugar, no pudo volver.
Muabia, de unos 60 años de edad, llevaba viviendo en Arteixo, en un piso de su propiedad desde hacía 20 años y siempre fue un vecino modélico.
Todos creían que un ser humano como él, tan serio y trabajador, no desaparece así como así, por lo que la pista siria era la única que les entraba en la cabeza.
Muabia llevaba muerto desde el mismo día en que nadie supo nada de él, como se ha sabido ahora.
El taxi se había quedado estacionado en su plaza de garaje
Pasaron los días y las preguntas de unos a otros sobre si lo habían visto nunca cesaron. Ni en el edificio, ni en el gremio de los taxistas, ni en la taberna O Cancelo, en la calle Pascual Veiga, regentada por un hombre también de origen sirio y con el que compartía muchas horas a la semana. Pero en el edificio empezaron a aparecer olores muy fuertes.
Hasta que hace una semana y media, la persona encargada de la limpieza del portal y de las escaleras del inmueble empezó a ver gusanos junto a la puerta donde residía Muabia.
Algunos ya andaban por otros pisos, así que inmediatamente la mujer avisó al presidente de la comunidad y este llamó a la Guardia Civil.
Una patrulla del cuartel de Arteixo se desplazó al lugar y al ver aquello decidió pedir ayuda a los bomberos, que forzaron la puerta y se encontraron con el cadáver momificado del hombre.
Aparece el cuerpo de un taxista en un piso de Arteixo que llevaba 18 meses muerto