Condenada una mujer por no pagar un taxi de Barcelona a Cunit

El importe de la carrera ascendía a 108,05 euros. Pero la denunciada manifestó que no tenía dinero

Condenada una mujer por no pagar un taxi de Barcelona a Cunit

Una mujer contrata un taxi de Barcelona a Cunit, no paga el servicio, y es condenada

Sobre la una de la madrugada del 14 de diciembre de 2019, la ahora condenada se subió a un taxi en la Estación de Francia de Barcelona y pidió al taxista que la llevará hasta la población de Cunit, en Tarragona, aunque sin especificar la calle de destino.

Cuando sobre las 2.06 horas llegaron al destino, la mujer le indicó al conductor que la dejara en el cruce de la carretera de Bellvei con El Vendrell.

El importe de la carrera ascendía a 108,05 euros. Pero la denunciada manifestó que no tenía dinero, y dijo al taxista que iría a casa de su madre para pedirle el importe de la carrera. Ante la desconfianza del denunciante, le pidió que le dejara algo en depósito en señal de garantía y ella le dio su DNI. La mujer nunca volvió para abonar el precio del servicio prestado.

El Juzgado de Instrucción número 4 de El Vendrell (Tarragona) condenó a la mujer al pago de una multa de 150 euros, como responsable de un delito de estafa.

La mujer recurrió el fallo

En el recurso de apelación, el abogado de la denunciada indicaba que la mujer reconoció no tener dinero para pagar, por lo que se estaría ante una reclamación de cantidad civil por incumplimiento contractual pero no de un ilícito penal.

El magistrado de la Audiencia Provincial, en la sentencia de apelación, recuerda que la carrera del taxi, en principio, se trata de un contrato verbal, como es la prestación de un servicio a cambio de un precio.

En este caso se trata de la prestación de un servicio que es totalmente voluntario por parte de la persona que decide solicitarlo: «Si cuando lo solicita no lleva dinero para pagar, sabiendo que debe hacerlo al final de la carretera, este dato por si solo acreditaría la intención de no pagar».

La sentencia ha sido confirmada por la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Tarragona, que ha rechazado el recurso de apelación y condena a la mujer al pago de una multa de 150 euros y a indemnizar al taxista con 108,50 euros -que era el importe del servicio-, además de la indemnización por el tiempo que el profesional invirtió en acudir al juicio, más los intereses legales.