Los taxistas de Nueva Gales del Sur reclaman una compensación más justa por la pérdida de licencias provocada por Uber
El Gobierno de Nueva Gales del Sur (NSW) acordó hace dos años aplicar un impuesto de 1 euro en cada viaje que realizaran los taxistas y los VTC para compensar el pago de las licencias de taxi que el gobierno tiene que compensar, debido a la permisibilidad de haber dejado operar a Uber y con eso haber destruido el sector del taxi.
En septiembre de este año vencía la aplicación del impuesto de un euro pero se renovó para poder seguir recaudando y así compensar las licencias.
El gobierno de NSW aseguró que se compensaría con 100.000 dólares cada licencia de Sydney y con, hasta 130.000 las licencias de fuera de la capital, pero no está siendo así.
NSW está pagando 55.000 dólares por las licencias
La diputada de LISMORE, Janelle Saffin, dice que está extremadamente decepcionada de que el último paquete de compensación para el sector del taxi del gobierno de Nueva Gales del Sur no ofrezca un pago justo por la compra de licencias de taxis regionales.
Una investigación de la Cámara Alta en 2020 encontró que el gobierno de NSW era el único responsable de la destrucción del valor en las licencias de taxi en Nueva Gales del Sur, por haber dejado operar a Uber sin licencia, lo que acabó con el sector del taxi.
Saffin, que esta semana se reunió con el presidente de la cooperativa de taxis de Lismore, Justin Stevenson, prometió llevar la campaña de los taxistas locales por una compensación más justa al Parlamento estatal la próxima semana.
Ella es una de los 60 parlamentarios de la Cámara Baja y Alta que han firmado un compromiso, exigiendo una «compensación justa y adecuada».
Stevenson dijo que el gobierno de Nueva Gales del Sur actualmente ofrece hasta 130.000 dólares por una licencia o placa de taxi regional, pero la cifra real para los 16 propietarios de Lismore es de 55.000 por cada una de las 24 licencias que poseen.
“Es insultante e irrespetuoso porque pedimos créditos o invertimos un promedio de 250.000 dólares por nuestras licencias. Eran nuestros ahorros para cuando nos jubiláramos del sector”, dijo Stevenson.
Históricamente, el precio más alto pagado por una licencia en el área de Lismore fue de 316.000 dólares. Stevenson dijo que la cifra de compra total de 130,000 solo se aplicaba a cuatro zonas, incluidas Tweed Heads, Ballina y Coffs Harbour/Sawtell.
“El paquete carece de transparencia porque la cifra de Lismore es de 55.000, la de Mullumbimby de 75.000 y la de Byron Bay, Kyogle y Casino de 25.000”, dijo Stevenson.
“Debería haber una investigación independiente sobre cómo se ha llevado todo esto”.
Saffin dijo que el trato del gobierno de Nueva Gales del Sur a los propietarios de taxis, -que son pequeños empresarios-, había sido vergonzoso desde que el auge de Uber obligó a la desregulación del sector.