Sin consenso en el sector del taxi en Valladolid para la reducción de la flota
Un brutal descenso de la demanda ha obligado al sector del taxi de Valladolid a intentar reestructurarse para cubrir la escasa demanda las 24 horas del día.
El objetivo del sector era redistribuir el trabajo entre todos los vehículos.
Seis asociaciones que aglutinan las licencias que trabajan entre la capital y los 23 municipios del alfoz han mantenido este jueves una reunión con la presencia del concejal de Movilidad, Luis Vélez, para fijar nuevos y obligatorios descansos para todos los vehículos para garantizar la prestación del servicio y, a su vez, repartir el negocio existente en la actualidad.
Sin embargo, no ha sido posible el acuerdo debido a la negativa de las asociaciones de Arroyo de la Encomienda, Avatar y Taxi Metropolitano.
De momento, y a la espera de nuevas reuniones, los taxis continuarán trabajando de forma indiscriminada.
El presidente de Radio Taxi, Ángel Luis Lorenzo Martín, destaca que la caída de los trayectos que se han realizado este año desde el comienzo de la pandemia ha sido del 70 por ciento, lo que hace imprescindible el hecho de hacer una reestructuración del sector que facilite un reparto más equitativo del trabajo y asegure que siempre se preste el servicio a pesar del toque de queda.
Lorenzo indicó que las restricciones marcadas por las administraciones han ocasionado que el taxi se haya convertido en un negocio «ruinoso» para muchos de sus compañeros y que durante la noche no quiera trabajar ningún taxista.
Lorenzo achaca la caída de la demanda a las limitaciones de movimiento entre comunidades autónomas:
«El toque de queda, y el cierre del ocio, especialmente la hostelería, han ocasionado que los trayectos realizados hayan caído a mínimos y no haya más remedio que ajustar el servicio para que todos los taxistas puedan trabajar, pero de momento no hay acuerdo».
Cabe recordar que la actual ordenanza que regula la prestación del servicio en Valladolid y el alfoz no recoge en ningún momento los descansos de los taxistas.
Es decir, en la actualidad cada vehículo puede estar en la calle las horas que considere necesarias sin ninguna limitación, lo que está ocasionando problemas con la llegada de las nuevas medidas restrictivas.
El toque de queda ha ocasionado que tan solo unos 40 coches presten servicio entre las diez de la noche y las seis de la mañana.
«Solo están los conductores asalariados que no tienen más remedio, los demás salen de las calles». Algo que puede considerarse normal teniendo en cuenta que durante las últimas dos semanas se han registrado noches donde «se han realizado 21 servicios en ocho horas.
Tan solo 40 coches están en la calle durante esas horas estos días y ahora vamos a reorganizarnos. Un sábado con toque de queda no hemos superado los 40 clientes».
Pérdidas muy fuertes
El sector atraviesa un momento muy delicado por la pandemia. Lorenzo explica que Valladolid ha perdido a los clientes que llegaban hasta la ciudad a través de la alta velocidad para la participación en congresos, también aquellos que acudían a citas en los centros de salud en gran medida y a la mayor parte de los clientes fijos.
Para el presidente de Radio Taxi, este sector es el más seguro dentro del transporte público, ya que la mayor parte de los vehículos han instalado mamparas protectoras para los clientes.
No obstante, ante la escasa demanda existente en la actualidad, Lorenzo se mostró convencido de que la única solución será ampliar los descansos en el futuro para reducir el número de taxis presentes en la ciudad para equiparar el beneficio de una forma equitativa entre las 474 licencias.
Sin consenso en el sector del taxi en Valladolid para la reducción de la flota